viernes, 31 de diciembre de 2021

¡¡ADIOS 2021!! ¡¡FELIZ 2022!!

 


 

Estamos llegando al final de este año 2021 y con ello, al último post del blog en este año que nos deja. Sinceramente, comparado con lo fatídico, malo y devastador que fue el 2020 para mí, este 2021 ha sido menos duro. Y deseo enfocarme en el plano personal.

 

En lo personal y en el balance general, debo calificar a este 2021 como el primer año entero del resto de mi vida sin mi amada esposa Silvana. Fue un año en el que tuve que aprender a vivir sin ella, y sobre todo, el sentir su ausencia física en ciertas fechas especiales. Siempre es difícil el primer año sin la persona ausente en fechas, como por ejemplo, mi cumpleaños, el cumpleaños de David, el día de la Madre, mi aniversario de matrimonio, su cumpleaños en octubre, el primer aniversario de su partida, y por segunda vez, navidad y año nuevo. Pero como señalé un año atrás, por ella debo salir adelante y ha sido –y sigue siendo- un proceso de duelo que no ha sido nada fácil, pero que sé que hay luz al final del túnel oscuro y que se sale de esto. Magullado, con heridas cerradas, pero se sale, y eso ya lo viví con mis padres. Lo bueno es que aquí en casa, con David, el hijo de Silvana, nos hemos apoyado mutuamente de manera incondicional y en un plano de sólida amistad y no de carácter paternal. Hay confianza total y absoluta, y la comunicación es permanente y total. Todo ello y la presencia de mi hijita perruna Frida han sido fundamentales para mí, para poder decir que un año después, me siento más tranquilo que antes. No hay día en que no piense en ella, no hay día en que no me dirija a ella y en tiempo presente, pero ya sin dolor o pesar profundo, sino con nostalgia y alegría, y sobre todo, con agradecimiento total por todo lo que vivimos juntos. Como le he dicho a varias personas, desde la partida de mi esposa, mi objetivo de vida es tener paz y tranquilidad. Y la tengo en casa, ya que disfruto estando aquí. Claro, cuando hay reuniones u oportunidades de reunirse con familia y amigos, siempre es bienvenido. Pero aquí disfruto harto de mis canales de streaming como Netflix, Amazon Prime, Star + y HBO-MAX y de las series y películas que sigo y veo.

 


Por otro lado, como ya todos sabemos, el Covid-19 siguió jodiendo al mundo. A comienzos de año, aquí la segunda ola fue más implacable y costó muchas vidas, incluso todos hemos perdido a algún familiar, amigo o persona conocida a causa del virus. Al menos, lo positivo fue que aquí llegaron las vacunas y felizmente en el mes de Julio, pude vacunarme con las primeras dos dosis y así poder sentirme más tranquilo y con las defensas más reforzadas. A Dios gracias, no me ha dado el Covid, principalmente porque me he cuidado bastante y he evitado exponerme innecesaria e imprudentemente. Y el pasado 20 de Diciembre pude acceder a la tercera dosis. Pero igual, hay que seguir cuidándose y no bajar la guardia. Respeto a quienes han asumido la postura antivacuna y no han querido hacerlo. Están en su derecho, pero con las mismas, también exijo que respeten la posición mayoritaria de muchas personas que sí hemos elegido vacunarnos, y que no nos califiquen como borregos o tarados que no saben decidir. Ante la variante Omicron, que ha hecho que en Europa nuevamente se estén tomando todas las precauciones del caso, esperemos que aquí se lo pueda contrarrestar en el 2022, y que no haya más variantes letales y mortales.

 

Por otro lado, a lo largo del año, estuve encargándome de los trámites referentes a la casa y poniendo en regla todo eso, y felizmente, todo salió bien. Y a Dios gracias, a fines del año pasado, inicié un trámite ante la AFP de mi esposa, para acceder a una pensión de viudez o sobrevivencia, el cual duró hasta junio de este año, en el que concluyó exitosamente. Desde Julio percibo dicha pensión, la cual me abonan en mi cuenta por parte de la compañía de seguros, y que me permite cubrir mis gastos personales y de la casa con total tranquilidad, y eso será hasta el día que deje este mundo. A Dios gracias, ya no tengo que preocuparme por salir a conseguir algo afuera o angustiarme por llegar a fin de mes. Sin duda alguna, esto ha sido un maravilloso regalo divino de parte de mi amada esposa Silvana, y sobre todo, su forma espiritual de cuidarme.

 

Finalmente, como gran fan de ABBA que soy, sin duda, el acontecimiento musical de este 2022, fue su regreso al mundo de la música con un nuevo álbum "VOYAGE", 40 años después de su anterior álbum en estudio, "THE VISITORS". Y el "VOYAGE" colmó totalmente mis expectativas y llenó de enorme alegría mi corazón.

 

¿Qué espero y deseo para este 2022? En lo personal, seguir viviendo con paz y tranquilidad, y tener algunos pequeños ingresos adicionales –como los que tuve en noviembre y diciembre-; y por supuesto, seguir contando con mi familia, al lado del hijo de mi amada esposa, David, y con mi hijita perruna, Frida, y también, con mucha salud.  

 

Por último, en cuanto al blog, en este 2021, me anime a volver a escribir nuevos contenidos, pero de acuerdo a motivaciones e impulsos que sentí en un determinado momento, para plasmar en un post lo que sentía adentro. El 4 de febrero, publiqué un post por los primeros tres meses de la partida de mi esposa, que incluso generó 30 comentarios. Y así salieron otros posts nuevos, como el dediqué a mi amigo Renato Shols ante su partida, al anuncio del regreso de ABBA con un nuevo álbum, a los 11 años de mi hija peluda Frida, al primer aniversario de la partida de mi esposa, al álbum “VOYAGE” de ABBA y al recordado profesor de nuestro colegio, Clive Bailey, al enterarme de su partida. De hecho que para el 2022, seguirá esa tendencia y por supuesto, con las infaltables actualizaciones.

 

Desde “ROYAL TRILOGY” quiero agradecerles profundamente por seguir siendo parte importante de este blog con sus visitas y comentarios. Sin ustedes, este blog no existiría y no habría seguido adelante. Con todo mi afecto, amistad y cariño, quiero desearles a todos ustedes y sus familias, que reciban tranquilos este año 2022 y que este nuevo año les traiga amor, paz, dicha y salud y que todos sus sueños, metas y anhelos se hagan realidad. Pero, principalmente, que no sea tan cruel y maldito como lo fue el 2020.

 


¡Desde el fondo de mi corazón, muchísimas gracias por haber sido parte importante de mi vida! ¡Dios los bendiga a todos ustedes y sus hogares!

 



 ¡¡FELIZ AÑO 2021, QUERIDOS AMIGOS!!