AQUEL TERCER LUGAR EN LOS MUNDIALES

Hoy sábado se juega el penúltimo del mundial Qatar 2022, para definir el tercer y cuarto puesto, entre las selecciones de Croacia y Marruecos. Vuelven a enfrentarse en este mundial, tras el empate 0-0 en la primera fase. Así que este podría ser un factor para jugarse con ganas y empuje.

Mucho se ha hablado sobre si realmente vale la pena jugar este partido, y ha habido argumentos tanto para estar a favor como para estar en desacuerdo. Los que están a favor, sostienen que es una tradición mundialista –la cual se instauró en el mundial de Suiza 1954- y que sirve para al menos terminar entre los tres primeros. Y los que se oponen, señalan que es un encuentro sin motivación alguna, y a puertas del final del mundial, lo único que interesa es la final y no un partido por el tercer puesto, carente de atracción. Hay parte de verdad en ambas posiciones. En mi opinión personal, pienso que es hasta cierto, un poco cruel hacer jugar a dos selecciones que se quedaron a un paso de llegar a la final y que no pudieron lograr su objetivo. Es como decirles, “recuerden lo que no lograron y confórmense con ese tercer lugar”. Es el peor premio consuelo que pueden llegar a disputar dos selecciones. Es como cuando estás en una situación en la cual te gusta alguien y estás enamorado o enamorada de él o ella, y le declaras tu amor y le dices que quieres estar con ella o él, y su respuesta es no, porque te ven solamente como un amigo (a), y para consolar tu pena, te dicen, "pero quiero que seamos amigos". En ese momento, después que te han rechazado y no has podido cumplir tu mayor deseo, lo último que quieres es “quedar como amigo”, y que eso sea un recordatorio de lo que nunca pudiste alcanzar. A eso sabe ese cruel premio consuelo del tercer puesto. Además, en ningún otro torneo, salvo los Juegos Olímpicos donde se juega una medalla de bronce, o en la Copa América, se juega por el tercer puesto.

Ahora, también es cierto que mucho depende de la actitud con la que se vaya a jugar este encuentro. Cuando juegan dos selecciones que ya han sido campeonas y que por ejemplo, pueden haber perdido la semifinal por penales y terminan con un dolor y amargura enorme por no haber logrado coronar el sueño de llegar a la final, ni ganas ni estímulo hay para jugar ese partido. O incluso cuando han hecho un esfuerzo físico enorme y quedas totalmente desgastado, como sucedió con Francia en 1982, al final ponen suplentes en ese partido, restándole jerarquía. Pero si fuera el caso, de selecciones "de menor rango”, llámese no potencias mundialistas, la cosa puede ser diferente, porque allí aún existiría un hambre de gloria por alcanzar una posición que nunca antes habían logrado. El ejemplo más claro fue en el 2002, con el partido entre Turquía y Corea, que ganó Turquía 3-2 y que fue un partidazo, para muchos el mejor partido por el tercer puesto en los mundiales. O incluso el del mundial Sudáfrica 2010 entre Alemania y Uruguay, que ganaron los alemanes por 3-2, en un partido muy disputado y bien jugado por ambos lados, con harta vergüenza deportiva y ganas de culminar bien su participación en el mundial.  Hay algunos países que se tomaron en serio la lucha por el tercer lugar y lo lograron, como por ejemplo, Chile en 1962, Portugal en 1966, Polonia en 1974, Croacia en 1998, Turquía en el 2002 y Alemania en el 2006 y 2010. Pero la gran mayoría de encuentros por el tercer lugar, han sido jugados más por obligación que por convicción. De todas maneras, hay que jugarlo y hacer el último esfuerzo para irse bien del mundial. Que hoy gane el mejor. Y para concluir los dejo con mi trilogía favorita de partidos por el tercer puesto en los mundiales de Argentina 1978, Corea Japón 2002 y Sudáfrica 2010.