1) Allá por 1991, supe de la existencia de una serie centrada en un adolescente y recuerdo que mi primo Aldo me la recomendó y me comentó que era diferente a las demás series, y que uno se identificaba en muchos momentos con el protagonista de la serie. Con esas referencias, me animé a verla y me gustó bastante. La serie “THE WONDER YEARS”, o “LOS AÑOS MARAVILLOSOS”, se ubicaba a finales de la década del 60, específicamente en 1968, y los problemas sociales y acontecimientos históricos de ese entonces, como la guerra de Vietnam o la cultura hippie eran vistos a través del personaje principal, el adolescente Kevin Arnold, quien a su vez afrontaba conflictos adolescentes típicos. Pero la peculiaridad era que mientras las historias se iban desarrollando, la misma historia era narrada por un Kevin Arnold ya adulto y con la sabiduría de los años, que describía lo que estaba sucediendo y lo que había aprendido de esas experiencias. Otra cosa que me gustó y que identificó a la serie con esos años de fines de los 60’s fue la cortina musical, que fue el tema "With a Little Help from My Friends" de Joe Cocker. Además, la música que acompañaba cada episodio era imperdible y reflejaba lo mejor de esa época y muchas veces caía apropiadamente en la trama.
Lo que más me gustaba de esa serie era que uno se identificaba plenamente con las experiencias de Kevin a esa edad y parecía como si uno se hubiera estado viendo a sí mismo en la pantalla. Y los intercambios entre la voz en off de Kevin adulto y lo que pasaba en el episodio eran simplemente geniales. Desde los 11 hasta los 16 años, uno evocaba pasajes de su vida, y hay hasta 3 episodios que me generaron esa sensación de revivir esos momentos de mi pasado. Uno de ellos fue cuando a Kevin le sale su primer grano. ¿Qué adolescente no se ha atormentado por eso? Y justo venía una amiga suya con su familia a visitar a los Arnold y Kevin estaba desesperado por hacer desaparecer el grano, y al final de tanto apretárselo, termina agrandándolo, y al terminar el episodio, resulta que la niña tenía un grano más grande. O cuando Kevin y 3 amigos van de “misión” para espiar una pijamada de niñas y pasan mil y un peripecias, y luego el líder del grupo es castigado por su mamá y ellos siguen con su misión, hasta que al final, llegan al lugar y los ignoran, y al final todos se regresan abrazados y felices de estar en grupo. O cuando uno de los amigos de Kevin saca su carro por primera vez y el resto del grupo jura que por ese solo hecho, todas las chicas iban a trepar a su auto. Así como esos 3 casos, se vieron muchos más, y otra de las cosas que me divertían eran las alucinadas de Kevin y su imaginación desbordante. Además, el pobre Kevin tenía que lidiar en casa con un papá que era un buen tipo, pero renegón hasta decir basta, una mamá que era un pan de Dios, una hermana hippie y rebelde, y un hermano mayor que era lo más insoportable y odioso del mundo. ¡Que personaje para más detestable era Wayne! Pero me encantó el episodio cuando los papás salen de viaje y Kevin organiza una fiesta que se sale de control y la casa termina hecha un desastre total. Al día siguiente los padres venían y Kevin estaba desesperado por arreglar todo y el tiempo estaba en su contra. Cuando llegan los viejos y se ven con la casa de cabeza, la cara de Kevin era de desesperación y lo primero que el papá hizo fue recriminar a Wayne y en un momento en que él hubiera hecho lo más acorde con su carácter odioso, acusarlo a Kevin, optó por echarse la culpa y pagar por lo que había hecho Kevin, ante la sorpresa desconcertante de Kevin. Cuantos episodios así de buenos se vieron en esta maravillosa serie. Soy sincero en señalar que no me perdí un solo capítulo y muchas veces, veía un episodio repetido y no me cansaba de verlo. Al final de cada capítulo, te dejaba un motivo para reflexionar y extraer lecciones de aprendizaje sobre la vida y la forma cómo te va llevando en su camino. Realmente uno terminaba de verlo con una sonrisa en el rostro y diciendo: “¡Que bonito capítulo!”
Y que decir el amor platónico de Kevin hacia su vecina Winnie Cooper. Una de las parejas de adolescentes más emblemáticas de la historia de la TV. Estuvieron juntos, pelearon, volvieron a estar, ella lo dejó por otro, y luego reiniciaron su relación hasta el final de la serie. Además, la indestructible amistad con Paul, el típico nerd pero con un corazón de oro, y amigo leal e inseparable de Kevin, con quien compartió tantas vivencias en la escuela. O los profesores, como uno los tuvo en su etapa escolar, como el profesor de Química, imperturbable y puntilloso, o el de Educación Física que era todo un personaje, o el profe de Matemáticas que era riguroso y que le enseñó a Kevin a pasar dicha materia en un episodio inolvidable que fue uno de mis favoritos.
El episodio final fue realmente uno de los mejores finales que he visto en una serie. Con emoción, nostalgia y sin dejar cabos sueltos. Y esa escena final fue cargada de sentimiento. Recuerdo que fue uno de los finales que me hizo derramar algunas lágrimas de emoción y que en su idioma original, la incluimos en este post líneas abajo, así como en castellano.
Luego de su final en 1993, nunca más hubo reunión alguna ni intentos de revivir la serie. Creo que la clave del éxito de esa serie fue su carácter UNICO e irrepetible, y que bastaron esas 6 temporadas para robarse el corazón de los que seguimos dicha serie. En lo personal, fue una mis series favoritas, no sólo de esta década, sino de siempre, porque por más que haya transcurrido el tiempo, cuando he tenido oportunidad de volver a ver un episodio, nunca me canso de verlo.
2) Siempre me gustaron las series policiales. Desde la época de “Las Calles de San Francisco”, de adolescente disfruté mucho de este género policial. Pero cuando un sábado por la noche que me quedé en mi casa viendo TV allá por el año 93, me llamó la atención una serie que mezclaba acción, intriga, humor y sobretodo, sensualidad: “SILK STALKINGS” o como se le llamó acá “CRIMENES DE SEDA”. Me encantaba la química que había entre sus dos protagonistas, los detectives Chris Lorenzo y Rita Lanz. Era una pareja que se complementaba muy bien en el trabajo y se apoyaban mutuamente, y ambos se llamaban el uno al otro “Sam”, en honor a su golfista favorito, Sam Snead. Ambos eran amigos de verdad y se cuidaban el uno al otro. En un principio no había ningún vínculo amoroso entre ellos y eso era lo que hacía atractiva la serie, el no cruzar esa delgada línea, que una vez cruzada, genera que las cosas no vuelvan a ser las mismas. Durante 5 temporadas –las cuales seguí puntualmente los sábados a las 11 pm por Canal 2- disfruté mucho de esta serie y también era una delicia par la vista los primeros 5 minutos de cada episodio y el intro, cuando se veían damas bellas y exhuberantes.
En lo personal, me gustaba mucho el desarrollo de la trama de cada episodio, y además de la pareja de Chris y Rita, me encantaba el personaje de su jefe, el Capitán Harry Lipschitz y su esposa Franny, que le daban el toque cómico a la serie. Para la 5º temporada, sucedió lo que muchas veces sucede en otras series, la pareja cruzó la línea, y la amistad se convirtió en amor, pero se veía un amor verdadero y no pasajero. La pareja llegó a casarse y Rita esperaba un bebe de Chris. Pero en esa misma temporada, los que seguíamos esa serie nos vimos sacudidos con la muerte de Chris, tras ser abaleado. Y en el siguiente episodio, Rita decidió irse a vivir a otro lugar para cuidar a su bebé. Aún recuerdo la escena final de ese episodio cuando Rita está frente a la tumba de Chris, el cual fue un momento muy conmovedor. Luego entrarían una nueva pareja de personajes Michael y Holly, pero no pasó nada con ellos, y después entró otra pareja, Tom y Cassandra, la cual duró 3 temporadas más, pero ya no era lo mismo. La magia de Chris y Rita, que fue el signo distintivo del programa, se había ido para siempre.
3) Cuando el cable llegó a mi vida, cambió mi forma de ver TV. Fue descubrir un nuevo universo y sobretodo, ver las series que aquí ni llegaban o que estaban atrasadas aquí. Pero en 1997 cuando me mudé, por motivos económicos y para reducir gastos, tuve que prescindir del cable por un año. No fue fácil, pero no tenía opción. Fue en ese año 97 cuando un gran amigo, colega y ex compañero de trabajo, Cesítar Terrones, hablando de las comedias, me comentó que de todas, para él la mejor era “FRASIER”. Sabía de la existencia de esta serie, ya que la pasaban de lunes a viernes a las 10 pm y los domingos a las 8 pm por Canal 7. Además, sabía de este personaje porque cuando comencé a ver “Cheers”, Frasier apareció en su 2º temporada como el novio de Diane Chambers. Sinceramente ese personaje no me llamaba la atención y me parecía aburrido, y cuando supe que había una serie sobre él, ni me tomé la molestia de verla. Pero luego de la recomendación de mi gran amigo, decidí verla un día por la noche a ver qué tal era. Y realmente me divertí viendo el episodio –justo fue el capítulo cuando Frasier cree que un mono había cometido un crimen- y comencé a verla y honestamente, me enganché viéndola, y no sentí la ausencia del cable. Era comiquísima y sus personajes eran cada cual más hilarante que el otro. Cada noche a las 10 pm no me perdía un solo episodio y así de esta manera, me acostaba relajado y contento de haberme reido por 30 minutos.
Esta comedia, cuya acción se desarrollaba en Seattle, duró 11 temporadas y acumuló una infinidad de premios Emmys, y cada personaje tenía lo suyo. Frasier Crane era el típico psiquiatra chiflado, de carácter pomposo, y a veces hasta snob, con mala suerte en el amor y tenía un programa de radio en la KACL de Seattle. Casado anteriormente con Lilith -quien era un témpano de hielo-, estaba divorciado y tenía un hijo Frederick que vivía con la madre y sus relaciones amorosas terminaban en un desastre casi siempre. Su hermano Niles Crane –también psiquiatra- era el típico snob y arrogante, con quien muchas veces competía, y lleno de exquisiteces a la hora que ambos iban al pub “Café Nervosa”. Estaba casado con Maris, a quien nunca se le vio en la serie, pero que era un personaje peculiar y con cada cosa que hacía arrastrar de la risa. El papá Martin Crane, policía retirado a raiz de una bala recibida, caminaba siempre con un bastón y adoraba su viejo y deteriorado sillón, el cual enfurecía a Frasier por desentonar con su apartamento. Daphne Moon, enfermera y fisioterapeuta para su padre y quien apoyaba en la casa de los Crane con las labores domésticas de la casa, era otro personaje peculiar. Proveniente de Inglaterra, decía que era psíquica y que veía cosas y las sentía antes de tiempo, y sabía como lidiar con el carácter renegón de Martín, quien la adoraba. Roz Doyle, la productora de Frasier en su programa de radio, era el brazo derecho de Frasier y siempre lo tenía al tanto de sus relaciones, y tampoco tenía suerte en el amor. Y no puedo dejar de mencionar a Eddie, el fiel perrito y mejor amigo de Martin, que sacaba de sus casillas a Frasier cada vez que lo miraba fijamente a los ojos.
Cuando volví a tener cable en 1998, ya continué viéndola primero por canal USA y luego por Sony. Adicionalmente, también veía series como “That 70’s Show”, “Spin City”, “3rd Rock From The Sun”, “Friends”, “Just Shoot Me”, “Will & Grace” y “Ally McBeal”. Pero ninguna me atrapaba tanto como “Frasier”.
Gran parte del humor de esta serie provenía de la búsqueda de Frasier del romance, así como de la pomposidad de Frasier como celebridad menor en la ciudad y su exagerada pedantería. Pero algo que fue un ingrediente importante en la serie y que marcó su ritmo durante muchas temporadas fue el amor platónico de Niles por Daphne. Desde que Niles la vio, sintió el flechazo directo a su corazón y a pesar que estaba casado con Maris, el veía a Daphne como un amor platónico, idealizado e imposible, y muchas veces se generaban situaciones y enredos comiquísimos. Cuando Niles se divorció de la enigmática Maris, Daphne estaba de novia con Donny, y en el final de la 5º temporada Niles se casa con Mel, pero descubre que Daphne sentía lo mismo por él, y decide finalmente expresarle a Daphne sus sentimientos, lo cual genera que Daphne dejara plantado en el altar a Donny y Niles se divorciara de Mel. A partir de la 8º temporada y dejando los escollos atrás, Niles y Daphne decidieron iniciar su relación y en la 10º temporada, se casaron y al final de la serie tuvieron su primer hijo, David.
El último episodio fue memorable y muy emotivo, y en el cual sucedieron muchas cosas: Martin se casó con su novia Ronee, Niles y Daphne tuvieron su primer hijo y Frasier quedó solo en su apartamento. Había recibido una buena oferta de trabajo en San Francisco y su novia Charlotte se había ido a Chicago. Ante eso, Frasier decidió aceptar el trabajo e irse de Seattle. Pero antes, en su último programa de radio se despide de su audiencia en un momento muy emotivo, y tomó el avión, y en el vuelo le cuenta todo lo ocurrido en las últimas semanas a una pasajera a quien conoció en el avión. Al final, su acompañante le agradece y la conversación termina cuando el vuelo de ambos finalmente aterriza … pero en Chicago.
Estas fueron las series que lideraron mis preferencias en la TV en la década del 90. Ya en siguientes posteos seguiré hablando sobre mis series favoritas en la actual década que concluye a fines de este año 2009, y cada post tratará sobre una serie en particular.
Aún recuerdo esa serie, aqui en España la titularon "aquellos maravillosos años". Me gustó muchísimo, creo que de las mejores series que he visto, y aún tengo en mi mente algunas escenas que me emocionaron. No sé si la habrán repuesto en alguna tv., me encantaría verla otra vez. En más de una ocasión, en casa he comentado esa serie y el bello recuerdo que me dejó.
ResponderEliminarSaludos
Te estoy escribiendo un poco tarde (2023). En Youtube tienes la serie entera. 30 años después he podido terminar de ver una serie que veia a trozos en mi adolescencia. Ponte a verla y descargatela. Es la mejor serie de todos los tiempos.
EliminarHola Anónimo. Muchas gracias por tu comentario.
EliminarAgradezco mucho tu información.
Saludos.
LUCHO
Hola querida amiga! Muchas gracias por tu comentario en el blog y en este post.
ResponderEliminarConcuerdo plenamente contigo en que "Los Años Maravillosos" es de lo mejor que se ha visto en la historia de la TV. Te llegaba al alma y a uno lo hacía rememorar ciertas etapas de su vida.
Sigue visitando el blog y comentando en los posts que desees.
Un abrazo.
LUCHO
Si bien yo vi algo tarde Los Años Maravillosos, me encantó desde que ví los primeros capítulos. La forma en la que era narrada era genial. Es una de las cosas que más me gusta de aquella serie.
ResponderEliminarLindo post, Lucho! Y sorry por no comentar en el de Deacon, se me pasó :(
Pero estuvo muy presente, lo leí (por partes practicamente) y me encantó =D
Saludos!
Hola Andreita! Muchas gracias por tu comentario en este post.
ResponderEliminarEs muy cierto, la narrativa de "Los Años Maravillosos" era soberbia y e guiaba en la trama del episodio.
En cuanto al post de Deacon, nunca es tarde, cuando gustes, el post está a tu disposición.
Un beso grande.
LUCHO
los años maravillosos!!! una excelente serie...la recuerdo con mucho cariño...aunque el final no me agrado mucho.
ResponderEliminar"crimenes de seda"....en mi país lo tenían con el nombre de "guantes de seda" recuerdo la intro, pero la serie no la veía.
Mi querida Massiel, que gusto tenerte por el blog. Muchas gracias por tu comentario.
ResponderEliminarSin duda, "LOS AÑOS MARAVILLOSOS" fue algo UNICO y que caló hondo en el corazón de los televidentes.
Gracias por participar en el blog y sigue visitándolo y comentando cuantas veces desees.
Un abrazo.
LUCHO
HOLA LUCHITO:
ResponderEliminarTe felicito por tu blog, me he divertido mucho con este articulo sobre tus series favoritas...Te comento que yo soy Frasier a muerte...Desde que la vi por primera vez, me enganche con esta serie, lo unico que lamento es haberme perdido el capitulo final, pero asi es la vida...Que sigas con los exitos y ya te comentare en otros posteos...Saludos...Clara
Y el que dice que los años marivillosos no le gusta....MIENTE!!!!!!!!!!!!!!!! es de lo mejor y nunca vi el final en tv lo tuve que ver hace un par de años en youtube. Y si.. al que no le salio un barrito.....tambien............MIENTEEEEEEEE!!!!!!! jajaj
ResponderEliminarCrimenes de seda me gustaba pero tampoco sabia del final y que tuvieron un hijo?? aa!!!!!!!
Fraser si nunca vi sabia que existia pero nunca vi un programa completo
saludos..
Karlriv
Mi querida Clarita, hasta que por fin te tengo en mi blog. Que gusto tan grande! Gracias por tu comentario.
ResponderEliminarAsí es, compartimos esa afición por "FRASIER", una elegante comedia que hacía arrastrar de la risa al televidente. Ese episodio final es muy emotivo, y puedes ver la escena final en el link que he puesto en el post.
Un gustazo habernos vuelto a ver el pasado sábado y sigue comentando en todos los posts que desees.
Un abrazo grande.
LUCHO
Mi estimado Carlitos, muchas gracias por tu comentario.
ResponderEliminar"Los Años Maravillosos" fue lo máximo, quien no se sintió identificado con las vivencias de Kevin Arnold. Quien no sufrió con su primer grano, je je.
"Crimenes de Seda" finalizó así con la dupla Rita-Chris, pero siguió con otra pareja de detectives, aunque ya no era lo mismo. De la secuencia que he colgado en Youtube en el post, sigue un episodio donde entierran a Chris y Rita decide irse.
Un fuerte abrazo, mi estimado amigo.
LUCHO
Hola Luchito... espero y te encuentres de lo mejor del mundo.. con dias de retraso pero bien aqui estoy nuevamente visitandote, y feliz de poder leer tu post!!
ResponderEliminarLos años maravillsos, wow q buena serie, seria mentirte decirte q la segui de principio a fin porq en realidad cunado yo la vi ya hhabia pasado du tiempo, y el canal q la sintonizaba pues no se q tan completa la dieron, porq fue ya hace varios añitos, tengo algunos vagos recuerdos de ella...
Pero si recuerdo q era maravillosa, imaginate describiendo la etapa de la niñez y pre-adolescencia y yo viviendo esa estapa, se me familiarizaba bastante jejeje... Y concuerdo contigo de lo bueno q era y eso era lo q la hacia unica era como Kevin adulto narraba la historia de sus aventuras y vivencias, en definitiva, era buenisima...
Bueno Luchito, me despido sin antes mandarte mis saludos mas especiales, y un abrazote!! Y en verdad que seri, me encantaria q la volvieran a sintonizar!!!
Saluditos!!!!
Hola Kathyta. Muchas gracias por tu comentario.
ResponderEliminarRealmente "Los Años Maravillosos" fue una extraordinaria serie, llena de nostalgia y originalidad. Y como bien dices, el que escucháramos a Kevin ya adulto contando cada historia, la hacía super especial. Ojalá que la vuelvan a pasar por cable.
Te mando un besote y un abrazo de oso panda con todo mi cariño.
LUCHO
Ohhh, que buena entrada, LOS AÑOS MARAVILLLOSOS una preciosa serie donde todos en algun momento nos hemos sentido identificados y el capitulo del dia de la independencia me dejo con una pena y solté un par de lagrimas u.u
ResponderEliminarEl capitulo de Poker es buena!
Queria que Kevin se quede con Winnie T_T
PD no sabia que eras abogado :)
Hola Maxwell. Muchas gracias por tu comentario.
ResponderEliminar"Los Años Maravillosos" fue una serie genial y original y muchos se sintieron identificados con las vivencias de Kevin. Ese episodio final fue muy emotivo y muchos moqueamos allí.
Un fuerte abrazo.
LUCHO