El 22 de Noviembre de 1963, una noticia paralizó a todo el
mundo. El Presidente de USA, John F. Kennedy había sido asesinado. Incredulidad,
estupor, indignación, tristeza y pesimismo, fueron varios de los sentimientos
que se apoderaron del mundo, luego de conocido el hecho. Aunque en ese momento,
el que escribe solo contaba con nueve meses de edad, y mi prioridad era comer
papilla, tomar biberón y no hacerme pupú en el pañal, pero mis viejos me
contaron que aquí la noticia fue una bomba de agua helada porque se sentía
cierta simpatía por Kennedy. Muchos años después, este tema siempre me generó
interés porque nadie se tragaba el cuento del “loquito” de Oswald que mató
solito a Kennedy. Y justo para el primer ciclo en Estudios Generales Letras, en
el curso de “Metodología de la Investigación Universitaria” había que hacer una
monografía de cualquier tema, y el tema que yo elegí fue el Caso Kennedy. Para
ello, me puse a leer libros, revistas de la época y artículos, que me dieron un
conocimiento más amplio de las dudas, misterios e interrogantes que todavía
quedaban flotando en este magnicidio sin resolver. Y ahora que se han cumplido
50 años de este hecho que enlutó a Norteamérica y a todo el mundo, tenía el
deseo de escribir un breve post, recordando el hecho, señalando aquellas dudas
e incoherencias de la versión oficial de la Comisión Warren y también dando mis
opiniones al respecto. Como siempre, no pretendo hacer una biografía de JFK ni
enumerar de manera detallada y exhaustiva todas las teorías conspirativas que
se han venido afirmando en las últimas cinco décadas.
En lo personal, siempre me pareció que el Informe Warren pecaba de insuficiente. O sus integrantes eran una serie de incompetentes e ineptos que no veían lo que se caía de maduro, esto es, que había muy fuertes intereses para ver muerto a Kennedy; o simplemente, actuaron con la finalidad de “vender” una “versión oficial” y así tapar descaradamente la verdad, prescindiendo de indicios y testimonios que hacían tambalear la tesis del asesino único. Por eso, siempre he pensado que querer hacer creer que Lee Harvey Oswald actuó por su propia cuenta y que él solito hizo los tres disparos en solo 6 segundos desde el edificio de Texas School Book Depository -como lo estableció el Informe Warren- es ofender la inteligencia humana, así como esa estúpida e inverosímil teoría de la "bala mágica", que según la versión oficial, correspondió al segundo tiro que penetró por la espalda del presidente, salió por la garganta, entró en la axila del gobernador Conally, perforó su pulmón, volvió a salir por pecho y dañó su muñeca y muslo. Francamente, esa idea parece sacada de “Matrix”. Para mí, todo esto fue una infame e impune conspiración para sacar a JFK del camino, porque chocó contra diversos y muy fuertes intereses en ese momento. Y al ver perjudicados sus intereses, simplemente le pusieron la cruz y se la tuvieron jurada. Además, al año siguiente, en 1964 iban a ser las elecciones presidenciales en USA y Kennedy tenía toda la intención de presentarse a la reelección. Si Kennedy hubiera sido reelegido en 1964, estos grupos de poder iban a tener muchísimo por perder. A nivel personal, comparto al 100 % todo lo que se expresó en el film "JFK" de Oliver Stone y que recogía la batalla del fiscal Jim Garrison por querer llegar a la verdad, e intentando demostrar la existencia de una muy poderosa conspiración.
Desde que sucedió el asesinato de JFK, muchas preguntas que
cuestionaron verdades oficiales han ido surgiendo, en diferentes puntos
alrededor de este caso. Y es bueno,
exponerlas para que cada uno saque sus propias conclusiones.
1.- Habiendo sido Dallas una ciudad que era abiertamente hostil
a JFK, ¿Por qué se decidió la visita de
Kennedy a esta ciudad? Y una vez que
llegó Kennedy, y sobre todo, sabiendo todo ello, ¿Por qué el servicio secreto
permitió que circulase el coche sin capota?.
2.- En cuanto a la versión que sostiene que Oswald hizo los tres
disparos en apenas 6 segundos. ¿Es eso creíble? En un artículo en la revista “Life”
de 1966, se indica que el Gobernador Connally había insistido en que había oído
lo que al instante identificó como un disparo de fusil y al volverse para mirar
al presidente, sintió el impacto de un segundo tiro. Cuando la Comisión pasó el
film de Zapruder para que lo viera el Gobernador, éste indicó ciertos instantes
durante los cuales le pareció que habría sido herido y el momento que
seleccionó era 1,3 segundos después del primer instante en que según la
comisión, pudo haber sido herido Kennedy. Los expertos han demostrado que el
arma homicida no podía disparar a intervalos menores de 2,3 segundos. Entonces
es clarísimo que Oswald no pudo haber tenido tiempo en 1,3 segundos para
disparar por separado a Kennedy y Connally y tendría que haber un segundo
asesino. En la película se ve que después de dos tercios de segundo desde que
Kennedy reaccionó al primer tiro, Connally reacciona al impacto del proyectil.
Es inverosímil que Connally reaccionara lentamente, mientras que Kennedy lo
hiciera casi instantáneamente. Asimismo, habiendo probado que cuando Oswald
estuvo en la Infantería de Marina, en un concurso logró hacer un punto sobre la
marca mínima. Y la revista “Life” alquiló los servicios de Huber Hammerer,
campeón olímpico de tiro para probar el arma usada y éste puso 6,2 segundos
para disparar tres veces. Por tanto, es poco creíble que siendo un tirador
mediocre, Oswald requería un asombrosa puntería, ya que resulta imposible que
disparara tres veces con cierta precisión y en un blanco en movimiento, en
menos de 6 segundos, y con un fusil dotado de mira telescópica defectuosa.
3.- Otra cosa extraña es que luego de producidos los disparos,
dentro del edificio del almacén de depósito, mientras un policía subía un solo
tramo de la escalera, Oswald bajó cuatro pisos, eligió una moneda y la
introdujo en el distribuidor automático de bebidas, sacó una botella y comenzó
a tomarla, sin siquiera estar sofocado, pese a que era un hombre que no podía
dominar sus emociones –lo cual demostró
cuando fue arrestado en el teatro Texas. Incluso Oswald al salir del
edificio, explicó nomás que era empleado y se deslizó entre la multitud. Una
simple pregunta, ¿Cómo cuernos la policía, que rodeó rápidamente el edificio
después de los disparos, dejó salir a alguien de un lugar en donde se buscaba
al asesino de un presidente?
4.- Otro hecho extraño es que tras Oswald abandonar el edificio
a las 12:35 horas, un minuto después, según la revista “TIME”, la policía lanzó
la consigna de dirigir sobre él todas sus patrullas, en una rapidez
extraordinaria, hallándolo sin testigos ni confesiones. ¿Por qué de manera tan
rápida ya se tenía identificado a Lee Harvey Oswald y ya se le anunciaba como
el asesino del Kennedy? Y encima se mostraba una foto de él con el arma
asesina. ¿Cómo supo la policía el itinerario
de Oswald? Y se dice que se sospechó de él, cuando el superintendente del
edifico, Trudy, reunió a todos los empleados y se notó que faltaba solo uno
entre noventa y para eso, se debió reunir a todos para pasar revista, quienes la
gran mayoría estaba afuera entre la multitud. También otro hecho sin
explicación es por qué Oswald no tenía pólvora en sus mejillas si había usado
un fusil. Las pruebas afirmaban que Oswald salió del edificio a las 12:35
horas, caminó hacia una parada de autobús, a cuatro cuadras, que a raíz del
tráfico bajó de él a tomar un taxi dos cuadras después a las 12:45 horas, según
“Time”. Bajó cinco cuadras antes de su casa, caminó, se cambió y tomó un arma,
precipitadamente, lo cual demostraba que no pudo tener tiempo de limpiar la
pólvora de sus mejillas, que requiere del uso de jabón y cepillo.
5.- Como se supo, Oswald siempre había negado su implicación y
aseguró ser un “chivo expiatorio”. ¿Por qué cuando estaban trasladando al
presunto asesino del presidente, Jack Ruby entró como en su casa y le disparó
delante del todo el mundo, asesinándolo? ¿Acaso fue una forma de silenciarlo
por si Oswald hablaba lo que sabía? Ruby fue un empresario nocturno del local
de striptease Carousel Club y figura secundaria del hampa estadounidense. Y la explicación que dio Ruby fue propia de
un niño: “Pensaba sin cesar en lo mucho
que Jackie había sufrido y en que John y Caroline no tendrían más papá. Alguien
tenía que hacerlo. Ustedes no podían. Nadie iba a pensar que yo iba a dejarlo
salir del asunto, ¿no?”. Una explicación insuficiente que pretendía mostrar
a Ruby como una especie de “héroe nacional”. Con la muerte de Oswald, se
eliminó toda posibilidad de saber si él fue o no el asesino, si actuó solo o
como parte de una conspiración, o si solo lo sembraron y lo pusieron en el ojo
de la tormenta.
6.- Finalmente, algo que fue muy extraño, fue la muerte
misteriosa de catorce testigos del asesinato de Kennedy en forma sucesiva.
Testimonios de personas que no fueron tomados en cuenta por la Comisión Warren
y que hubieran servido para ir más allá de la ridícula y convenida versión
oficial.
Han transcurrido ya 54 años y la idea de que esto fue
producto de una conspiración es algo que un gran y mayoritario porcentaje de
personas lo asume como algo cierto. Lamentablemente no ha habido ni se ha
mostrado pruebas o evidencias directas que avalen esta teoría, pero una cosa
que es cierta es que hasta el día de hoy, hay dudas e interrogantes que no han
sido respondidas y que siguen alimentando la tesis del complot impune. Se ha
atribuido este complot a diversos grupos, como la CIA, el FBI, hombres de
negocios de extrema derecha y radicales cubanos anticastristas, resentidos con
JFK por Bahía de Cochinos y que acusaban al presidente de ser blando con el
comunismo. Desde aquel 22 de noviembre del 63 ha habido un “sinfín” de teorías
más o menos creíbles. Vuelvo a decir que comparto con puntos, comas y tildes,
todo lo que se señaló en la película “JFK”. Y esa escena en que el protagonista
JIm Garrison –interpretado por Kevin Costner-
conversa con ese personaje encarnado por Donald Sutherland fue reveladora y
clarísima. El gran éxito de este magnicidio –que
en 50 años aún no ha sido resuelto- hace pensar que la cosa no fue propia
de un solo grupo. Esto fue organizado
por sectores con demasiado poder. El negocio de la guerra y las armas para el
conflicto en Vietnam era un super poderoso motivo. Esto fue un golpe de estado,
pero no como los que sucedieron en Latinoamérica en donde un gorila derrocaba
al gobierno de turno y se quedaba en el poder de manera evidente. Allá en USA,
estos poderosos grupos tenían el poder suficiente para bajarse un Presidente y realmente
lo lograron. Y lo hicieron sin mover un dedo para que luego, la situación
volviera a estar favorable a sus intereses. Y yo sí creo que Lindon B. Johnson
estuvo metido en esto, ya sea de manera activa o haciendo la vista gorda. Si
no, ¿por qué tanto apuro en juramentar en el avión que lo llevaba a Washington
y no esperar llegar recién allí para proceder a asumir el cargo? Además esto
era como una especie de escarmiento y advertencia para que nadie más se
volviera a atrever a desafiar sus intereses y que si lo volvían a hacer, ya
sabían lo que les esperaba. Se dice que toda la documentación de las agencias
de seguridad estadounidense sigue clasificada, aunque una pequeña parte de ella
se hará pública en 2029, dentro de 12 años. Quizás entonces se pueda aportar
algo de luz al misterio. Aunque honestamente lo dudo. Pero siempre quedará en
el recuerdo la figura y la imagen de John F. Kennedy, quien le dio un nuevo
estilo de gobernar y que muy querido no solo por los norteamericanos sino también
por todo el mundo. Y esperemos que algún día la verdad salga a flote.
Hola Luchito,
ResponderEliminarGracias por este buen post. Lo que mencionas de que "asombrosamente" las autoridades gringas tuvieron el ataque de intuición más grande de la historia y se lanzaron inmediatamente a la caza de Oswald sin mayor prueba de nada, me recuerda al reciente atentado de bomba en la maratón de Boston, donde se culpó a dos muchachos, cuando se veía en las fotos que sus mochilas no coincidían con la mochila que llevaba la bomba. Se hizo igual. Demasiado sospechoso. En el caso de JFK, con el mayor descaro le mintieron al mundo entero.
El otro día leía un artículo con los comentarios de un estudioso del tema, y dijo que la única teoría que no podía descalificar era la que menciona a la CIA como responsable del homicidio. A esperar que se hagan públicos los documentos, pero aún así, creo que muchos ya habrán sido destruidos o los destruirán para sostener su mentira.
Un abrazo,
Pepa
hola Lucho, buen paso para abrirse otros temas el q has dado, después de ver JFK no quedó mayor duda de q fue una conspiración casi perfecta ... pocos q participaron deben estar vivos (uno George Bush, q era de la CIA y algo debe saber) ... pasado tanto tiempo solo los archivos confidenciales podrán dar un poco más de detalles y creo q falta mucho aun ... la mejor alerta a quien trató de desenmascarar a eso q llaman la "sinarquía" ... el cierre de una etapa en EEUU ... con razón el status quo se dijo hay que divertir a las masas ... a los 3 meses 4 pelucones revolucionaban una nación aun en shock ... nada ha cambiado desde q lo mataron, siguen teniendo marionetas como lo es Obama (premio nobel de la paz jajaja) ... saludos
ResponderEliminarBueno, estarás de acuerdo conmigo, Luchito, en que esos 4 pelucones (si, como entiendo, se están refiriendo a los Beatles) se ganaron su sitio por méritos propios. Enormes méritos.
ResponderEliminary con demasiada ayuda de la prensa y la TV... una campaña de marketing muy bien orquestada ... su primer LP lanzado por otra compañía (Vee-Jay si no recuerdo mal) pasó casi desapercibido en EEUU... no es a los Beatles a quienes se está juzgando aquí sino a los que mueven los hilos de la distracción de las masas, el engranaje de la prensa, el poder, los mismos que 2 años después empujaban a los radicales se rasguen las vestiduras por las declaraciones de Lennon ;)
ResponderEliminarHola Pepita. Muchas gracias por tu comentario.
ResponderEliminarMe alegre que te haya gustado este post. Es cierto, sin pestañear, la policía ya tenía a Oswald como principal y único sospechoso. Y ese informe Warren era una ofensa a la inteligencia humana. Y cuando se hagan públicos esos documentos, este caso será solo un recuerdo de lo que estos poderosos fueron capaces de hacer en 1963.
Un abrazo.
LUCHO
Hola Jaime. Muchas gracias por tu comentario.
ResponderEliminarRealmente este tema siempre me apasionó y ahora con los 50 años, no podía pasarlo por alto en el blog. Y concuerdo con la muerte de Kennedy se ponía punto final a una época en la que se tenía fe en el gobierno para dar paso a la impunidad total de los grupos de poder. Y coincidentemente la llegada de los Beatles a USA hizo olvidar lo que 3 meses antes había sufrido un país.
Un abrazo.
LUCHO
Hola de nuevo Pepita. Gracias por comentar.
ResponderEliminarEs cierto, esos cuatro pelucones -tal como los de los mayores calificaban a los Beatles- causaron furor en USA y por mérito propio. Eso está clarísimo, pero al Gobierno de USA le cayó del cielo este acontecimiento, que mandó a un plano secundario lo acontecido con JFK. Y por supuesto, todos los medios supieron capitalizar muy bien este hecho.
Un abrazo.
LUCHO
Hola de nuevo Jaimito. Gracias por comentar.
ResponderEliminarEs cierto, a raiz de la apoteósica presentación de los Beatles en "EL Show de Ed Sullivan", la prensa y la TV contribuyeron con ese mega éxito. Y como bien dices, esos que mueven los hilos de la distracción de las masas, lo hacen de acuerdo a sus intereses.
Un abrazo.
LUCHO
hola Lucho, para q Pepa no piense que creo en esos libros de Bilderberg: esos 4 pelucones fueron lo máximo ... he estado curioseando en youtube sobre teorías acerca del asesinato de JFK (como que renovaste cierto interés sobre el tema) ... hay cada locura que solo te puede llevar a concluir que fue el plan perfecto ... todo un ejército conspiró para matar a Kennedy ... un "Fuente Ovejuna" siniestro
ResponderEliminarHola de nuevo Jaime. Gracias por comentar.
ResponderEliminarSobre eso, no hay discusión, como los Beatles no hubieron, no hay ni habrán. Y sobre el caso JFK, hay mucho folklore, y concuerdo en que esto fue el plan perfecto. 50 años después, aún siguen las dudas.
Un abrazo.
LUCHO
Así es Luchito. Cuando se haga pública toda esa información clasificada, ya los responsables estarán muertos, y no se podrá sancionar a nadie. Como bien dijeron tanto tú como Jaime, fue el "crimen perfecto". Para que sepan los sgtes presidentes que con la Cia nadie se mete. Incluso leí hace poco que un ex miembro de la Cía estuvo en la comisión Warren.
ResponderEliminarHola de nuevo Pepita. Muchas gracias por comentar.
ResponderEliminarEs cierto, si ahora nomás los culpables probablemente ya estén muertos 50 años después, cuando esto se abra dentro de más años, eso será algo inalcanzable porque no va a quedar nadie. Fue el crimen perfecto.
Un abrazo.
LUCHO