OTRA ABSURDA MUERTE VINCULADA AL FUTBOL: ¡BASTA YA!

Cuando el 1º de Noviembre del 2009 escribí un post por la absurda muerte de la señorita Paola Vargas a manos de una tira de malnacidos, dizque hinchas de la U, manifesté mi protesta y mi sentimiento de indignación ante tal cobarde asesinato (http://royaltrilogy.blogspot.com/2009/11/barras-bravas-no-barra-de-cobardes.html). Han pasado poco menos de 2 años y nuevamente la muerte hace su aparición a raiz de un partido de fútbol. Voy a ser sincero, no pensaba escribir este post ni estaba entre mis planes hacerlo, ya que ya había expresado mi opinión en el 2009, en donde señalé claramente mis argumentos al respecto, los cuales no voy a escribir en forma reiterativa. Pero ante lo sucedido el pasado fin de semana, no puedo quedarme callado y guardar un silencio complaciente.

El pasado sábado, como ya sabemos, fue el clásico U-Alianza en el estadio Monumental. Un clásico siempre viene cargado durante la semana por declaraciones de los jugadores involucrados y hasta con notas con jugadores de ambos equipos para darle emoción y hasta algo de intensidad al encuentro por venir. Y Alianza llegaba mejor a este partido, en la punta y jugando bien en los partidos previos. La U llegaba con todos sus problemas, pero en un clásico, los carteles previos no sirven de nada, porque ambos equipos salen a la cancha a quere ganar. Estuve viendo por partes el partido y me senté a verlo en los últimos 10 minutos y grité el segundo gol crema que le dio el triunfo a la U por 2-1. En ese momento, después de esa alegría, con mi esposa nos pusimos a ver algunas películas en el cable y así concluyó el día. Fue recién al día siguiente cuando leyendo el diario, me enteré de la noticia de que había habido un muerto que había sido hincha de Alianza, que había sido arrojado desde el palco como un paquete de basura. Lo primero que pensé fue que de repente este hincha había ido a provocar a los hinchas cremas en los palcos y como respuesta, lo arrojaron al vacío. Si así hubiera sido incluso, nada justificaba un vil y cobarde asesinato. Pero al leer el desarrollo de la noticia tanto en los diarios como en la TV y darme cuenta cómo había sido la cosa, me entró un sentimiento de rabia, indignación, verguenza y asco ante tal cobarde hecho. Y al ver las imágenes, se ve como esta cobarde turba destroza todo lo que se le ponía al paso en los palcos y que lamentablemente culminó con el terrible costo de una vida humana. No voy a ampliar en detalles sobre este hecho, porque hay bastante en los medios y en el internet y cada uno de ustedes ya debe haberse enterado con amplitud de este absurda muerte del joven Walter Oyarce Dominguez.

Seamos sinceros, esto ya se veía venir. Como se ha mostrado en varios programas en estos días, la seguridad en los palcos del estadio Monumental es un saludo a la bandera. Como es propiedad privada de los dueños de los palcos, en los últimos partidos eso se había convertido en tierra de nadie y muchos metían cantidades enormes de licor sin control alguno y así como metieron licor, han podido meter drogas, pistolas, cuchillos, combas y cosas similares. Y lo peor es que TODOS se lavaban las manos y se tiraban la pelota. Nadie asumía responsabilidad alguna y con su silencio iban permitiendo que se fuera cultivando un ambiente de harta exacerbación generado por el consumo de licor y drogas, sumado al contenido "pasional" de estos encuentros. Y han sido varios los testimonios que señalan que esta gente de los palcos, con la mayor impunidad posible generaban broncas y ambientes caldeados y encima tiraban latas, botella y objetos a la gente de las tribunas. Pregunta elemental, ¿dónde cuernos están las autoridades? ¿Acaso los palcos tienen el tratamiento de una embajada o un claustro universitario? El tema es que nunca se hizo nada y de tanto jalar la pita en forma insistente, se terminó rompiendo por el lado más débil, causando la muerte de una persona. Y ahora, salen todos a hablar y dar su opinión, figureteando en la televisión, cuando no hicieron absolutamente nada para evitar esto. Ayer que veía el programa "Enemigos Públicos", conducido por un hincha crema confeso como lo es Aldo Miyashiro, me impactó la parte del primer reportaje cuando le preguntan a un niño porqué había venido con una camiseta de Perú y el niño responde con mucha madurez "¿Acaso quieres que me maten?" y en el oído le confiesa al reportero que es hincha de Alianza. Por Dios, ¿puede ser posible esto, que uno tenga que ocultar sus simpatías por un equipo determinado para evitar que lo agarren a golpes o peor aún, que lo acuchillen o lo maten? ¿Dónde mierda estamos? Me parece patético e injustificable que por el hecho de tener encima la camiseta de un equipo rival, sea el equipo que fuere -U, Alianza, Cristal, Boys, Cienciano o el Muni-, uno no pueda desplazarse tranquilamente por la calle sin arriesgarse a que ese sea su última caminata y con ello, llene de luto a su familia. Y lo peor es que esto ocurren en cualquier momento relacionado al partido de futbol en mención: antes, durante y después del partido. Si es antes, agrediendo o hasta ultrajando a personas que se les crucen en su caminata al estadio; durante el partido, con invasiones en las tribunas rivales provocando innecesariamente y después, destrozando impunemente la propiedad privada. ¿Quién le repara a una persona que vive por allí el daño causado en su hogar, ya sea en las lunas de su auto o en las ventanas de su casa? ¿El club? ¿Los hinchas? ¿Los jugadores? ¿Las autoridades? ¿El Estado? Todos silban y miran hacia arriba y zafan cuerpo. Por eso, es absolutamente entendible que los vecinos de La Molina y Ate siempre se opongan que hayan encuentros en ese estadio, porque eso es de nunca acabar. Y nadie hace nada por corregir eso. Eso es lo peor de todo. Uno se pregunta -disculpen mi forma de expresarme pero me siento con rabia total-, ¿Por qué miércoles la Municipalidad de Ate ha permitido que jueguen partidos cuando ese estadio no tenía licencia ni reunía las condiciones mínimas de seguridad? Y no es la primera muerte que sucede en ese estadio, ¿O acaso se han olvidado cuando acuchillaron a ese hincha del Boys cuando jugaron U-Boys hace algunos años? Claro, cuando hay billete de por medio, me hago el loco y paso piola. Aquí nomás suceden estas cosas, mientras que a un pequeño comerciante le hacen problema por cada mínima cosa en su negocio para que le den la licencia y encima ni le permiten operar? Y ahora sale el alcalde de Ate a llenarse la boca diciendo que el Monumental será vetado. Por mí que lo veten, y hace tiempo debió haberse hecho esto, así de simple.

Por otro lado, cuando uno ve a los agresores en los videos, se rompe el mito de que solo los pirañas o los del sector D y E son los revoltosos. No, también es gente de clase media y hasta media alta, de buena apariencia, y hasta profesionales. Serán clase A o B por fuera, pero por dentro son de la peor escoria y pertenecen a la clase Z, si la hubiera, por esas actitudes delincuenciales. No voy a señalar sus nombres porque en este blog no los voy a hacer famosos. Solo son unos malditos asesinos y delincuentes que cuando están en grupo, allí sí son hombrecitos y matones, pero a la hora de afrontar su responsabilidad, huyen como ratas despavoridas, e incluso fugando del país mostrando su plena y total cobardía. Gente basura que no merece consideración ni contemplación y que debe ser sancionada con todo el rigor de la ley y que los condenen 30 años y sin un puto beneficio, para que sepan lo que es bueno. Aunque ni la pena más severa le devolverá la vida al joven Walter Oyarce ni calmará el dolor de su familia, sobre todo, de su padre, quien 15 días atrás había enterrado a su padre y ahora entierra a su hijo. Esta lacra de seudo hinchas demuestra que para ellos la vida no vale nada y que es como si mataran un bicho o una cucaracha. Y esto no puede permitirse. Lo malo es que ahorita todos se suben al carro, y como lo señaló bien el congresista Alberto Beingolea, en 4 o 5 días, la marea baja y la gente se va olvidando de esto y la siguiente semana juega Perú contra Paraguay y si gana Perú, la gente celebrará y ya nadie se acordará de esta absurda tragedia. ¿Es justo esto?

Por último, lo que sí me parece lamentable y condenable es que en varios grupos del Facebook hayan miserables que no solo se burlen de esta muerte sino que la celebren como si fuera un logro. Por favor, dónde estamos. ¿Que espera el Facebook para bloquear estas páginas por hacer apología a un delito? Y aquí adjunto una pequeña muestra. Saquen ustedes sus propias conclusiones. Y una sugerencia, si no son indiferentes a esto, entren a estas página y reporten y denuncien estás páginas para que sean bloqueadas. No podemos permitir que con nuestro silencio se siga haciendo escarnio de una estúpida muerte.

Desde este modesto blog, queremos expresar nuestras más profundas condolencias y solidaridad a la familia de Walter Oyarce y la acompañamos en su dolor. Imagínense un solo segundo si esto le hubiese sucedido a un hijo o hija de ustedes, a un sobrino o al hijo de un amigo o a sus hermanos. ¿La reacción sería la misma? Esperemos que se capture cuanto antes a estos asesinos y que los sancionen como se merecen. Quienes amamos el futbol y acostumbrábamos ir al estadio con nuestros viejos o amigos del colegio en la década del 70 y hasta del 80, miramos con nostalgia esos momentos en que ir al estadio era un motivo especial para pasarla bien y a veces ir con tu familia. Y ahora miramos con sana envidia como en las ligas europeas, cuando hay clásicos, en las tribunas vemos a personas con sus familias ir a disfrutar de una fiesta. Hasta en un Barcelona - Real Madrid, que es el clásico que se vive con mayor rivalidad en Europa, no hay estos desmanes ni pirañadas. ¿Algún día podremos llegar a eso? Da pena ver que aún no, cuando antes uno lo ha vivido con placer y fervor como hincha. Ser hincha no es sinónimo de ser delincuente ni piraña, quienes utilizan el futbol para dar rienda a sus bajos instintos. Ojalá que en un futuro no muy lejano, nuestros hijos o nuestros nietos puedan llegar a sentir lo que nosotros sentimos en nuestra niñez, adolescencia y juventud: disfrutar de la fiesta del futbol. Mientras no se entienda esto y se vea el futbol como un instrumento para delinquir, que se tomen las medidas del caso. A situaciones extremas, medidas extremas, así de simple.

Disculpen que me haya extendido en este post, pero necesitaba decir esto y defogar esta indignación que aún siento en el alma. Y no lo he hecho para figuretear ni mucho menos. Si este post no genera comentarios o si hay comentarios desfavorables, me tiene sin cuidado. No puedo permanecer cómodamente en silencio y hacer como si no hubiera pasado nada. Ya mañana retornaremos con nuestro segmento musical de 1991. Pero este modesto blog no podía permanecer callado ante este condenable crimen.

¡DESCANSE EN PAZ, WALTER OYARCE!

Y una vez más, ¡¡EXIGIMOS JUSTICIA!! ¡¡YA!!