Translate

sábado, 28 de abril de 2012

COSAS QUE ME DISGUSTAN - II



Primero que nada, quiero expresar mi agradecimiento por la gran acogida que tuvo el post “COSAS QUE ME DISGUSTAN - I", que publiqué el sábado 31 de marzo.  Sinceramente la idea fue solo ejercitar un poquito de catarsis señalando tres de las muchas cosas que detesto. Y ello generó una alta cantidad de visitas así como también de comentarios, que llegó al punto de haberse convertido en el post más comentado con 40 comentarios, en lo que va de este año 2012. Muchos han compartido en sus comentarios su trilogía de cosas que odian y ha sido divertido en algunos casos y gratificante en otros. Y por supuesto, eso ha constituido en un gran estímulo y aliciente para seguir compartiendo con todos ustedes este nuevo segmento de carácter personal, el cual irá -de acuerdo a lo que señalé en dicho post- según lo permita el tiempo y la inspiración y no porque tenga que hacerlo, u obligado por las circunstancias.  Y bueno, este primer post ha sido como un exitoso “programa piloto” y lo que vendrá más adelante será como los episodios de la primera temporada de una serie. Así que hoy, último sábado del mes de abril, damos inicio a este segundo post y ahora, compartiré con ustedes, una trilogía más sobre cosas que odio.

1)   En el post pasado hablé de los apestosos que abundan en los micros y que esparcen sus insufribles olores en nuestras narices. Pero cuando uno se refiere al concepto de “cochinada” o “apestosos”, hay más conductas que pueden ser incluidas en este término y que son igual de nauseabundas. Para ser más exactos, si hay algo que detesto enormemente son los “pedones dolosos e intencionales”. ¿A qué me refiero con esto? A aquellos que sueltan sus pestilentes olores gaseosos, con “traición, perfidia, alevosía y ventaja”, con la única finalidad de que las personas que están a su alrededor tengan que aguantar su gracia y soportar una atmósfera comparable a lo que debe haber sucedido en Chernobyl o a los efectos de una bomba bacteriológica. Claro, una cosa es que de manera involuntaria y discreta se te escape uno, e incluso que te haga sentir algo de culpabilidad, pero otra cosa es soltar una ráfaga de ametralladora pedorreica sin piedad ni misericordia alguna por el prójimo. Aunque lo peor es cuando el sujeto lo hace de manera silenciosa, esa es la manera más cruel, despiadada e inhumana de hacer daño al olfato de los pobres que tengan la desgracia de encontrarse a metros del sujeto. Me hace acordar a las épocas del colegio en donde nunca faltaba un cerdo que estando ubicado entre varias personas alrededor de una mesa o algo parecido, recorría calladito alrededor de la mesa, desperdigando su “obra” y segundos después, se sentía como si se hubiera destapado la tapa del desagüe más asqueroso del mundo provocando la estampida general de todos los que se hallaban allí. A esos sujetos deberían condenarlos a la cámara de gas, bien amarrado a la silla y que le hagan respirar la mismas porquerías que tan alegre e impunemente sueltan y que se queden encerrados en ese lugar por un buen tiempo hasta que se les atrofie el olfato. 


2)  Otra de las cosas que francamente odio y bastante es cuando estoy sentado almorzando un menú o lo que fuere, en un restaurante y viene alguien hacia mi mesa a preguntarte, “disculpe, ¿me puedo sentar en su mesa?”. Me enerva cuando me piden eso, y no porque sea un antisocial, un amargado o alguien que rechace comer acompañado. Si almuerzo o como acompañado de alguien, es porque ambos lo hemos decidido y hay un mutuo acuerdo. Pero no, estos sujetos, tienen la frescura y encima, la “ostra” de llegar tarde a un restaurante y al no encontrar sitio pretenden imponernos su presencia. Y encima uno que llegó temprano justamente para poder alcanzar una mesa y estar tranquilo y no pasar por esas situaciones, tiene que aguantarse estas invasiones a su mesa a la hora que uno almuerza. En ese aspecto, yo sí soy directo y frontal, cuando me preguntan, lo primero que digo es “estoy esperando a alguien”, si es que estoy de buen humor. Pero si me agarran cruzado, lo que digo, “disculpa, pero este no es un comedor popular”.  Porque hay gente que es bastante conchudaza o nacida en la localidad de Conchán. Y una vez me pasó y eso me dejó curado para siempre. 

Era el año 2008 cuando en esa época trabajaba por Miraflores y almorzaba siempre en “La Casa de los Anticuchos”, en donde los menús eran ricos y era comida de casa. Y siempre llegaba temprano y cada vez que alguien osaba pedirme sentarse en mi mesa, de arranque nomás le decía, “sorry, espero a alguien”. Pero un día, se me dio por ser buena gente –o un soberano pelotudo quizás- y un tipo me hizo la pregunta y yo asentí con la cabeza, dándole a entender que sí. Y en eso, el tipo le pasa la voz a dos personas más y los tres se sentaron en mi mesa ante mi sorpresa e indignación total. Y encima las mesas no eran grandes, sino bien chicas y cuatro personas sentadas allí implicaba comer apiñado mismo Robotito, chocándote con el que estaba al costado. Para suerte mía, al costado izquierdo en ese preciso instante se terminó de desocupar una mesa y me paré de inmediato y les dije de frente, “Disculpen, pero no me gusta comer incómodo como robot ni tampoco como si estuviera en un comedor popular. Quédense con su mesa”.  Y me fui hacia mi mesa con cara de pocos amigos.  Y en ese momento, me dije “nunca más”. Y me importa un bledo si luego de haberles dicho “espero a alguien”, termine de almorzar y me pare de mi mesa sin que nadie haya llegado. Una vez me paré y un tipo que me había pedido compartir la mesa, se quedó mirando que me retiraba, y con toda la frescura del mundo le dije, “sorry, no vino”.

3) Creo que una de las cosas que todos odiamos, sin excepción alguna –el que diga lo contrario ya sería un masoquista o alguien con la autoestima en el subsuelo- es el pasar por algún roche o vergüenza. En ese momento, realmente queremos que la tierra nos trague o ponernos una bolsa en la cabeza para no ver a nadie o misma avestruz, deseamos meter la cabeza en un hueco o poner y sacarla cuando la humanidad se haya extinguido. Ya sea haciendo algún ridículo, o diciendo algo que no debió decirse o la típica, cuando te resbalas y te caes aparatosamente –si es gordo el que se cae, la carcajada de convierte en llanto de la risa. Todos hemos pasado por eso, el que diga que no, que lance la primera piedra. Y a veces nos avergüenza decirlo pero ya con el tiempo, nos provoca risas y carcajadas, aunque en su momento, que nadie hable de ese tema y si alguien lo hace, adiós amistad. En mi caso, he pasado por una buena cantidad de roches y a estas alturas, me río del asunto. Y este tercer punto del post, será motivo para compartir algún roche personal o de algún conocido. Y entre los tantos roches que he tenido oportunidad de pasar, el que en forma unánime se lleva las palmas –entre toda la gente que me conoce- es uno que me sucedió en 1979 a la edad de 16 años, en mi último año escolar, cuando me encontraba en una fiesta. 



Me acuerdo que con tres amigos había ido a una fiesta de un colegio, no me acuerdo si era del Pestalozzi o de otro colegio. La fiesta estaba buena y la música era la que se escuchaba en las radios en ese entonces. Y en eso, terminó una canción y comenzó una que francamente no me acuerdo cuál era, pero que era buenísima. Y no quería dejar de bailarla. Recorrí la pista de baile y la gran mayoría de chicas ya estaban bailando y quedaba casi nada y en eso, levanto la cabeza y en eso veo a una chica que estaba parada de costado y la toco del hombro y le digo “¿bailas?”. La chica me miró, sonrió y se puso a bailar. “Ufff, yo mismo soy”, me dije, y me puse a bailar moviendo los brazos y pegándome a la chica –sí, era un coqueto de m…-, y divirtiéndome al compás de la música. Cuando en eso, la chica se ríe y me mira y me dice a boca de jarro, “disculpa flaco, pero estoy bailando con él”, y me señala a un tipo que efectivamente estaba a su costado bailando con ella y a quien no había visto. En ese preciso instante, me detuve en seco, sonreí nerviosamente a la chica, me di media vuelta y mismo correcaminos, salí disparado de ese lugar de la pista de baile. Ya se imaginarán, quería que en ese instante en la Casa Blanca hubieran apretado el botón rojo y que la bomba nuclear desapareciera el planeta tierra. Demás está decir que en ese momento, la fiesta terminó y se fue al mismísimo cuerno porque ya me quería ir. Ahora que lo veo en retrospectiva, si viera en una fiesta a una pareja bailando y luego que venga un sujeto que de repente y de un momento a otro se ponga a bailar con la chica, me orinaría de la risa.  Hay más roches por contar y en cada uno de estas secciones, irán en este punto número 3.

Bueno, esta ha sido una nueva entrega de esta sección. Espero que les haya gustado y como la vez anterior, los invito a compartir sus opiniones sobre estas tres cosas que he compartido con ustedes o cualquier otra experiencia similar. Hasta el próximo post en que seguiremos compartiendo tres cosas más que odio. Hasta la próxima.


30 comentarios:

  1. jajaja me he matado de risa con tu post Lucho. Tus anécdotas son geniales... Bueno del primer caso definitivamente da cólera que la gente ande lanzándose cuescos a diestra y siniestra. Utilizo la palabra "cuesco" o "meteorismo" porque "pedo" me suena mal. Aunque debo confesar que últimamente no he sentido mucho de esos casos. Sí de ls cochinos apestosos que no se bañan, pero los de meteorismos creo que en menor proporción.

    Lo de la mesa, no seas exagerado tampoco. Muchas veces he compartido mesa... y otras veces he pedido si me pueden ceder un asiento. Claro, tampoco exagerando de jalar tres puntas más. A veces el tiempo apremia y tienes que almorzar. Además debo confesar que en más de una oportunidad me tocó alguna persona interesante con la cual conversé amenamente.

    Los roches, para que te cuento, tengo un Phd en meterme en problemas.

    Pd.- no sé si es mi lap top, pero el link de tu blog en el facebook no cargaba. Entré por el blogger.

    ResponderEliminar
  2. Es verdad que los cobradores de bus son en su mayoría caracúlicos, tienen un mal humor que da asco algunos. Uno intenta ser educado dándole los buenos días y son incapaces de emitir un simple hola. Ahora, también voy a quebrar una lanza a su favor, ya que mucha gente que sube a un bus es por demás estúpida.
    Cuando subes debes al menos hacer lo posible de ir lo más al fondo del vehículo para que puedan subir los otros, pero no, hay personas que están en el medio, estorbando, y no se mueven ni un centímetro. No debe ser fácil para un cobrador estar diciendo constantemente al fondo que hay lugar. Tampoco comprendo que cuando sube una mujer embarazada o con niños el propio cobrador tenga que pedirle a la gente que deje un lugar, hay algunos que sientan el culo y no los sacás ni aunque suba un lisiado.
    Otra tema, noto que tu sitio no se actualiza en los vínculos de los otros blogs, aparece como si hace unos 6 meses no se actualizara. No comprendo. Saludos.

    ResponderEliminar
  3. Hola mi estimado Eduardo. Muchas gracias por tu comentario.

    Concuerdo contigo, los pedones son de la peor especie, pero enfatizo en los "dolosos", que lo hacen a sabiendas de sus efectos nocivos. Lo de la mesa, llámame antisocial, pero eso me revienta. Claro que si fuese una fémina interesante, replanteo mis ideas, ja ja ja. Pero por ese motivo, jamás pido compartir mesa, prefiero irme a otro sitio. Y finalmente en cuanto a los roches, tu blog lo dice todo, ja ja.

    Que raro lo que me cuentas. Yo no tenía ese problema.

    Un abrazo.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  4. Hola Pablo. Muchas gracias por tu comentario.

    No se cómo será allá, pero aquí los cobradores son de lo peor que hay, mismo lumpen. Y encima son apestosos, en su gran mayoría y malcriados. Y eso ocurre desde que yo estaba en el colegio, así que saca tu cuenta, que el próximo año cumplo 50. Es cierto lo que dices que hay gente que no colabora, pero muchos lo hacen como una forma de joderlos a estos individuos. Lo que sí me parece despreciable que haya gente sentada en los sitios reservados y suba una mujer embarazada y ni se inmuten. Eso me indigna.

    Sobre lo último que me indicas, varios me han hecho ese comentario. Honestamente no sé que puede estar pasando. Le he hecho la consulta a blogger y no he tenido respuesta. Algo debe estar sucediendo.

    Un abrazo.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  5. jajajajajajaj EN SERIO LUCHO eso de los pedos dejaselo a Edu jajajajajajaja... por Diosss y los pobres pasajeros aparte de maltratados se quedaron oliendo tu comida???? nooooo que ascooo ajajajjajaja.... es una de las cosas que mas detesto y preguntame a mi que en mi cole habia cada asqueroso... no... no soy delicada ni nada pero eso es COCHINESSSSS.... jajajaja... al menos lo tuyo fue solo venganza... pero en serioooo te pasasteeee jajaja.... lo de la mesa... pues yo siempre dejo que se sienten conmigo... no me incomodo ni nada... mas bien me apresuro y dejo que ellos coman tranquilos... osea si me piden compartir la mesa les digo si y me apresuro a comer.... me incomoda ver gente parada esperando una mesa... jejejeje.... y lo del baileee jajajajjajajajaj bueno... a todos nos paso alguna vez un TRAGAMEEE TIERRAAAAA jajaja... Beso Lucho! en serio que reír!!!....<3

    ResponderEliminar
  6. Hola Lucho: Me he cag...de la risa con lo de tu "venganza" del cobrador!
    Con lo de las mesas, me acuerdo del menú en la Central o el Ruso. Ahí no había mucho q pensar -y menos de tiempo- sólo poner la bandeja y "tragar"
    No es necesario aclarar si quien quiere un espacio para almorzar es una Agnetha o Frida peruana...;)
    Me ha pasado recientemente en la cafetería del CAL a la hora del almuerzo. Y claro q con las "coleguitas" mucho respeto x eso de "donde se come no se...".
    Un abrazo,
    Coco.

    ResponderEliminar
  7. Hola Marielita linda. Muchas gracias por tu comentario.

    Me has hecho reir con eso de dejárselo a Edu, ja ja ja. No sabes cuantas vueltas le di para decidir si incluía o no esta anécdota. Me arriesgaba a que la gente crea que soy un cerdo, pero por eso aclaré que no lo soy, ja ja. Felizmente los pasajeros no tuvieron que soportar mi venganza porque se hizo a milímetros del cobrador y de la puerta, je je. Pero por eso, digo que jamás hago eso siempre, never. Eso fue una venganza nomás, ja ja ja. Lo de la mesa, así soy yo, me gusta comer solo y detesto que alguien me imponga su presencia. Y lo del baile, tu lo has dicho, ¡¡¡trágame tierra!! A cualquiera le puede pasar, pero a los 16 años, lo sientes como la verguenza de tu vida, ja ja. Me alegra que te hayas divertido.

    Te mando un beso grande.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  8. Hola mi estimado Coco. Muchas gracias por tu comentario.

    Fue una venganza bien "Sui generis". Cuanto sentí las señales en mi organismo, allí me dije, "esta es", je je. Y el tipo se lo merecía, ja ja. Me has hecho reir eso de poner la bandeja "tragar como Alf". Pasé por eso varias veces, je je. Y muy cierto, "donde se come, no se ...".

    Un gran abrazo.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  9. Jajajaja, ay Dios! Pobre cobrador Luchín!!! Pero eso le pasa por malcriado también pues! Aj yo soy más asquienta y me gano con los pedos de todo el mundo, pero el que más recuerdo es uno de hace unos meses. Eran como las 2 am. y yo dormía plácidamente y en eso sentí un olor taaaan horroroso que me desperté. No sabes la rabiaaaaa que me dio, porque él(mi esposo), bien campante seguía dormidote y yo asfixiándome. Lo peor es que yo si me despierto, tardo al menos 2 o 3 horas en volver a dormirme, tengo el sueño demasiado ligero y tenía que levantarme temprano y encima era interminableeee, cuando el olor iba aflojando, venía otro y así no había como dormir. Estaba asadaza no sabes, tanto, que cometí una indiscreción. Me metí a face y puse en mi estado "JAMÁS imaginé despertarme por el olor de un pedo!!! Esta madrugada se produjo una MASACRE a mis nervios olfativos..." Fue indiscreto lo sé, pero como me llegó que me despierte a esa hora pues!!!

    Lo de la mesa también me llega, en Lima no recuerdo que me haya pasado, pero en Moscú a cada rato. En los centros comerciales, en el food court, mismo Jockey Plaza, pucha la gente se te aplastaba en la mesa sin decir nada y con su cara de piedra, ay que horrible, por eso yo prefería comprar para llevar, o meterme a un restaurant que ahí si no pasaba eso, pero pucha como llega, encima si pasa como a ti esa vez, que se sienta una mancha y uno solito, parece que es uno el que está de favor en la mesa, qué tal raza pues!

    ResponderEliminar
  10. Y roches en discotecas, te contaré por primera vez y en exclusiva lo que me pasó en una discoteca en Moscú, que no le he contado a nadie aun, ni a mi esposo, porque yo siempre fui un cuero irresistible y me daba roche, jajaja. Bueno pues, estaba recién llegada a Moscú y me sentía la última chupada del mango. Unos chicos que conocimos (mi hermano y yo) al poco de llegar, nos invitaron a salir una noche y nos llevaron a una discoteca latina. Yo que aun no sabía de las costumbres rusas, y ya que hacía un frío que te meas, me fui recontra abrigada, con mi chompa cerrada de cuello alto y mil cosas más encima, mis botas de nieve, etc. Al encontrarnos con la gente con la que iríamos, las chicas iban vestidas igual que yo, pero al llegar a la discoteca, en el guardarropa, se calatearon prácticamente, y hasta de zapatos se cambiaron y se pusieron sandalias de tacón! Y yo muriéndome de calor con mi chompa de cuello alto y mis botas empeluchadas por dentro. Me sentía una monjaaaaaaaaa, era la única que vestía así en la disco. Y no es que tenga la costumbre de ir medio calata a una disco, pero tampoco taaaan vestida, pero como allá hacía tanto frío, claro que me olvidé el pequeño detalle de la calefacción. Luego de un rato y unos traguitos, recuperé la confianza en mí y me dije a mí misma que la ropa no interesaba y que yo era un cuero con chompa, con minifalda o con sotana si hacía falta, qué cosa? Al ratito apareció un grupo juvenil salsero, no recuerdo el nombre, estaba de moda en Lima por aquellos años, y las chibolas se morían por ellos. Claro que allá nadie los conocía y eran un grupete cualquiera que canta un ratito en cualquier discoteca. El que cantaba tendría unos 22 años o así. Yo los odiaba en Lima, pero cuando estaba allá me moría por escuchar hablar a alguien en español. Y cuando escuché sus canciones atorrantes que tanto detestaba en Lima, me emocioné. Cuando terminaron su presentación, un montón de rusitas se acercaron en plan regalón al grupo. No sé qué malévolo espíritu chocarrero tropical me poseyó en aquel momento, pero me acerqué tan campante al cantante a sacarlo a bailar. Claro yo muy cool, no como las chibolitas esas que reboloteaban alrededor de los muchachitos. Bueno pues, los humos de femme fatale me los destruyó el muy hijo de la grandísima Betty Boop, cuando al decirle "bailamos?" (segurísima de que saldría corriendo a bailar conmigo porque soy bella) me responde "no sé bailar" y se volteó a seguir hablando con las chibolas taradas. En mi puñetera vida había sacado a bailar a un chico y para cuando se me ocurre hacerlo, me topo con un estúpido. No me quedó más que darme la vuelta (con la poca dignidad que me quedaba y con la cabeza bien alta y la cara roja como un tomate) y cruzar toooooda la discoteca hasta donde estaba mi hermano, qué roche!!! Yo juraba que mi hermano no se había dado cuenta y me puse a hablar con él de lo más normal haciéndome la loca, en eso volteo y veo al imbécil ese bailando con una rusa, aj! Pero me hice la que no lo vi, pero mi hermano me preguntó "oye ese no es el huevón que te choteó hace un rato?" Casi se me cae la cara al piso, pero encima mi hermano me dice, "ahorita vengo" y se fue hacia donde estaba el chico este, en plena pista de baile y no sé qué le habrá dicho, porque eso si, mi hermano no grita, pero al chiquito le fue cambiando la cara y no volvió a bailar hasta que se fue. Le pregunté a mi hermano qué fue lo que le dijo y me dijo que "nada, dice que lo disculpes." Ay, se me quitaron las ganas de seguir ahí y ya quería irme a mi casita, pero luego se me pasó el roche y bailé de lo lindo toda la noche.

    ResponderEliminar
  11. Qué bacan tu post, me he matado de risa Luchito y me has hecho recordar muchas cosas. Sigue improvisando así, que lo haces muy bien! Anoche leí el post, pero ya no lo comenté porque era bien tardecito ya y además tenía a mi esposo de chismosón al lado preguntando "qué lees ah?", porque yo estaba matándome de risa pero muy disimuladamente, pero cuando iba leyendo tu pedo en capítulos, se me salió la carcajada contenida.

    Beso!!!

    Pd. Calajo, no pensé que fuera taaaan largo mi comentario que lo he tenido que cortar en tres para que no me lo rechace blogger.

    ResponderEliminar
  12. Hola Lenya. Muchas gracias por tu comentario, misma obra teatral en 3 actos, ja ja. Te lo contestaré también en 3 actos, je je.

    Créeme que jamás hubiera hecho eso en otras circunstancias, pero veía que el tipo maltrataba a diestra y siniestra a todos los pasajeros, que cada vez iba pensando, "¿cómo lo jodo a este?" y cuando comencé a sentir sonidos en mi estómago, se me prendió el foco, je je. Por otro lado, me he reído con tu anécdota. Que bravo, ja ja ja. Y en lo que concierne a la mesa, me alegra que coincidamos en eso. Me molesta la desconsideración de las personas. Si quieren sitio, vayan más temprano, pero no nos impongan su presencia.

    Un besote.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  13. Hola de nuevo Lenya. Gracias por comentar.

    No sabes cuánto me he reido con tu anécdota en Moscú. Tienes buenas anécdotas, podríamos hacer un blog conjunto, ja ja ja. Que roche el que me cuentas. Se lo que sentir eso, y en ese momento quería que un rayo me partiera y me desintegrara, misma caricatura. Al menos, tu lo superaste y te divertiste toda la noche. Yo no, tenía apenas 16 años, ja ja.

    Un abrazote.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  14. Hi again mi querida Lenya. Gracias por tu "tercer acto" en comentar, je je.

    Gracias por tus palabras. Son un estímulo y aliciente. La idea es cuando sienta el impulso, hacerlo. Y al menos, una vez por mes, está ideal. Al menos, ya tengo fijado el próximo roche que contaré en el tercer punto, je je. Tengo buena cantidad de roches, aunque soy un principiante comparado con Eduardito, ja ja ja.

    Amiga linda, gracias por siempre estar pendiente. Por eso es que ayer decidí poner tu e-mail en la lista de e-mails a quienes les llega la notificación de todos mis posts. Es mi manera de agradecerte por siempre comentar.

    Te mando un beso grande. Se te quiere un EGG!!!

    LUCHO

    ResponderEliminar
  15. Jajaja ay Lucho, eres un mate de risa, y bien seriecito lo escribes todo.

    Sobre el punto 1, bien hecho, ese tipo se merecía esa bomba pedógena.

    En el segundo punto te conté que discrepo, pero bueno, es cuestión de caracteres, eso sí, que no jodan trayendo a toda su manchita, qué tal conchudez.

    Sobre los roches, a ver si hago memoria y escribo un post de ello.

    Ovaciones de fondo para esta entrada.

    ResponderEliminar
  16. Hola Paty. Muchas gracias por ty comentario.

    Es cierto, ese cobrador se lo merecía, je je. Y en cuanto al punto 2, detesto la frescura y prefiero cortar por lo sano. Y en cuanto a los roches, quien no ha pasado por ellos. Esperaré tus posts.

    Gracias por tus palabras. Y espero verte mañana en la reuna bloggera.

    Un abrazo.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  17. Buena critica, yo tambien odio esos huevones que tiran pedos no solo en los carros sino en cualquier evento, cine, auditorio.

    A mi todavia nadie me dijo para sentarse a la mesa, seguro eres atractivo por eso te dicen x)

    Y de roches hay muchos pero como el tuyo, ahhhh.
    Hoy la reuna en Risso a las 7:00pm, no faltes te esperamos

    ResponderEliminar
  18. Hola Maxwell. Muchas gracias por tu comentario.

    Realmente es una vaina cuando estás en un sitio cerrado y por ahí, percibes que alguien se ha caldeado. Es para encerrarlos en un sitio cerrado y hacerles oler lo mismo y peor. En cuanto a la mesa, ja ja, no es para tanto maestro, es porque la gente es super conchán. Y ese roche fue de antología, pero comparado con Eduardo, soy un bebé de pecho, ja ja.

    Allí estaré en el Food Court de Risso a eso de las 7:15 pm. Me dará mucho gusto conocerlos a todos ustedes.

    Un abrazo.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  19. Que buen post por Dios!!! Lucho qué genial escribes las anécdotas!!! Creo que Marcelo Gasan puede sacar algunas ideas nuevas y buenazas de este post!

    Ni que decir de los pedos cercanos, es lo peor!!! Y lo de compartir mesa con un NN!!! jajajaja

    Tus historias si que son dignas de un libro y más si son para reir!!! Lucho en verdad me encantó este post!!!

    Beso!

    ResponderEliminar
  20. Hola Marité. Muchas gracias por tu comentario y por tus palabras. Realmente yo me he inspirado en Marcelo Gasan -o Edu- con todo su master que tiene en historias y roches, ja ja.

    Me alegra que te haya gustado este post.

    Te mando un abrazo muy grande.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  21. Clara Raquel Romero1 de mayo de 2012, 22:28

    ME HE REIDO MUCHO CON TU POST, AMIGO....UNO SIEMPRE SE CRUZA CON UN TIRADOR DE BOMBAS GASIFERAS, YO TB LOS DETESTO...LO DE LA MESA NO ME AGRADA COMPARTIRLAS PERO TODO DEPENDE DE COMO ME LO PIDEN AUNQUE NUNCA HE TENIDO MALA EXPERIENCIA AL RESPECTO...YO TB HE PASADO MIL ROCHES EN LA VIDA....RECUERDO UNO CUANDO TENIA 16 AÑOS TB, ESTABA CONVERSANDO CON UN PATA QUE ME MOVIA EL PISO EN LA PARROQUIA, CUANDO NOS ESTABAMOS DESPIDIENDO ME DA UN BESO EN LA MEJILLA Y NO ME HABIA PERCATADO QUE DETRAS MIO ESTABA EL POSTE DE LA CANASTA DE BASKET Y YO QUE ME VOLTEO Y ME DOY TAL GOLPE EN LA FRENTE, QUE YA TE PODRAS IMAGINAR QUERIA QUE ME TRGARA LA TIERRA Y LA AMIGA QUE ESTABA CONMIGO EN ESE MOMENTO SOLTO TAL CARCAJADA PORQUE ELLA SABIA QUE ME GUSTABA, EN FIN...TREMENDO ROCHE Y EL PATA ME IMAGINO QUE SU AUTOESTIMA SUBIRIA HASTA LA ESTRATOSFERA JAJAJAJA...CARIÑOS...CLARA

    ResponderEliminar
  22. Hola Clarita. Muchas gracias por tu comentario.

    Me alegra que te haya divertido el post. De eso se trata, je je. Compartimos el odio por esos delincuentes ecológicos y ambientales. Y en cuanto a los roches, de solo imaginarme lo que me contaste, me he doblado de la risa, ja ja. Quien no ha pasado por eso, y ya para el próximo post tengo otro roche por contar, je je.

    Un abrazo.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  23. Hola Luis... esta muy divertido tu post....Concuerdo con 02 de las cosas que odias: la de los pedos ( ajjj ) y la de los roches (yo tengo miles)...
    Pero si alguien me pide compartir la mesa no me molesta, siempre y cuando respeten el hecho de que solo deseo almorzar y no conversar ...a veces salgo a almorzar en grupo con la gente de la oficina, pero si un dia estoy almorzando sola es porque no quiero hablar con nadie y fastidia cuando un desconocido te quiere hacer la conversacion....

    Ya que das pie para que te contemos alguna cosa que odiamos... te comento que yo ODIO, DETESTO, ABORREZCO, REPUDIO Y DESPRECIO a las personas que tiran basura en las calles, no hay nada que me JODA mas que ver a un estupido(a) arrojando su botella de agua o la envoltura de su chocolate.. en ese momento la rabia se apodera de mi, dejo de lado los buenos modales, me transformo y empiezo a gritar (a veces con insultos) al culpable.... me he ganado muchas broncas, si te contara...
    Una vez, mientras esperaba un taxi, vi a una chica arrojar su botella de agua al suelo cuando al lado de ella habia un tacho de basura, luego de su cartera saco una mandarina cuya cascara tambien iba cayendo al suelo de a pocos, yo recogi la botella del suelo para tirarla al tacho, no sin antes decirle "Oye sucia, nada te cuesta arrojar la basura al tacho!!! "... la chica me contesto con un insulto, yo le conteste con otro, me dio tanta rabia que pense arrojarle la botella a sus pies mientras seguiamos insultandonos, la gente se iba juntando alrededor.... no se como lance la botella que en vez de caer a sus pies cayo en su cabeza cerca de la frente, cayo con fuerza porque sono plop, la chica se molesto mas y ya se venia contra mi (a pegarme seguro) pero como habia mucha gente mirando, gente que apoyaba mi causa, la detuvieron un poco, asi que yo toda maricona me meti a un taxi cerre las puertas con seguro (la chica era una super gorda "cuerpo de camionero" seguro tenia mas fuerza que yo) Le dije al taxista arranque !!! vamonos !!! pero mientras el taxi arrancaba segui peleando haciendole señas...

    A pesar de esta y de otras broncas mas, no puedo contener mi bocota cada vez que veo a alguien tirar basura... es como si me transformara...

    Espero seguir leyendo post como este...
    Un Abrazo !!

    ResponderEliminar
  24. Hola Vanessa. Muchas gracias por tu comentario. Y bienvenida al blog!!

    Me alegra que te haya gustado el post. Te invito a leer el primer post que publiqué el 31 de marzo. Bueno, veo que coincidimos en dos puntos. En cuanto a la mesa, lo que me disgusta es la conchudez de llegar tarde al sitio y pretender obligar a alguien que comparta su mesa. Y en cuanto a la experiencia que has contado, créeme que a mí también me indigna cuando alguien bota basura a la calle, no sabes cuanto hígado hago. Claro, no llego al punto de pelearme porque esa gente es bestia y bruta y no vale la pena exponerse. Pero me da rabia y es probable que el próximo post hable de eso. Ya me diste la idea, je je.

    De hecho que al final de cada mes, verás posts como este.

    Te mando un abrazo super grande.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  25. Hola Lucho!
    Por suerte acá no es costumbre compartir la mesa, pero si fuera así, sin duda le diría que no al que lo intentara.
    Muy graciosa tu anécdota del baile! Mi peor "roche" (jaja que buena palabra) fue en un retiro espiritual con mi colegio, estábamos en la capilla sólo las alumnas de mi curso (unas 35) y el sacerdote, una ceremonia muy intima, cuando en pleno silencio, me empezaron a sonar las tripas, pero bien fuerte. No sabía dónde esconderme!!
    Saludos!

    ResponderEliminar
  26. Hola Sil. Muchas gracias por tu comentario.

    Me alegra que te haya gustado el post. Me he reido harto con tu roche, je je. A mí también me ha pasado y te sientes con ganas que el mundo desaparezca, ja ja.

    Un beso grande.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  27. Hola de nuevo Luchito, soy Magroz17 ahora para comentar en este, tu muy ilustre post.

    Independientemente de lo divertido que se le pueda ver, las cosas que comentas también las odio. Ya había leido tu post pero no había comentado nada porque de momento no se me ocurría que cosas comentar, pero ahorita ando en un momento súmamente molesto y enojado, y bueno, si puede servirme de terapia permíteme desahogarme un momento en este post de tu blog.

    Como ya te he comentado, mañana salgo de viaje para ver el concierto de Paul en México, por lo tanto el día de hoy tengo montones de pendientes que resolver y de esa manera poder irme tranquilo.

    He estado manejando casi todo el día en la Zona Hotelera de Cancún así como en otras partes del centro, solo para darme cuenta que la calidad de la gente que se ha venido a vivir a Cancun ha disminuido notablemente. No es por hablar de la gente de La Cd. de México y sus alrededores, pero para manejar son unos cafres, unos salvajes, unos egoistas y desconsiderados. Son gente que muchas veces no respetan los semáforos en rojo ni los mas elementales reglamentos de vialidad.

    Cosas que odio en cuanto a tráfico se refiere.

    1. Me molesta que haya tipos que no respetan la cola para entrar o dar vuelta en una calle o atravezar una avenida y se meten por delante de todos para pasar primero cuando llegaron al último.

    2. Me molestan los camiones o buses que te rebasan por la derecha a toda velocidad para inmediátamente pasarse a tu carril y frenar, solo porque el pasaje va a bajar, muchas veces en lugares que no son parada de autobus. Si van a hacer eso, ¿por que no se van todo el tiempo por el carril de baja velocidad?. Lo único que ocasionan estos es que estés a punto de tener un accidente o en último de los casos que tengas que detenerte por completo, solo ´porque ellos están violando el reglamento de circulación.

    3. Me molestan los motociclistas lentos que en la cola de un semáforo en rojo, se pasan entre todos los carros para llegar hasta adelante solo para que cuando el semáforo se ponga en siga, ellos vayan a velocidad bajísima, no dejando pasar a ningún otro auto y que solo por un motociclista se tenga que detener o dejar de fluir la circulación vehicular.

    4. Me molestan los tipos que se estacionan el lugares designados para discapacitados cuando no tienen ninguna discapacidad y solo lo hacen para estar mas cerca del lugar a donde van.

    5. Me molestan los autos que en un estacionamiento y cuando muchas veces hay pocos lugares para estacionarse, se estacionan ocupando dos lugares o estacionandose tan mal que ya no permiten que otro auto se estacione al lado.

    6. Me molestan los automovilistas que se estacionan en doble fila y que no permiten muchas veces que el auto que estaba estacionado no pueda salir o tenga que esperarlos hasta que regresen. ¿creeran que tenemos todo su tiempo?.

    Puff....disculpame Luchito, pero es que el día de hoy ha sido caótico y todas estas cosas me han pasado, solo porque he tenido que estar conduciendo la mayor parte del tiempo del dia de hoy, y lo peor es que aun tengo algunas cosas que resolver, así que me armaré de paciencia!

    Bueno ya, trataré de tranquilizarme, todo sea porque mañana me voy de viaje y el jueves a disfrutar de un grán super concierto. Cuidate mucho Luchito y estamos en contacto.
    Un fuerte abrazo!
    Magroz17.

    ResponderEliminar
  28. Hola mi estimado Magroz17. Muchas gracias por tu comentario.

    Entiendo tu lista de cosas que detestas. Aquí también el tráfico es un caos y varias cosas que detesto y que serán objeto de posts posteriores. Pero es super estresante.

    Bueno, que todo salga bien y que tengas un buen viaje y que disfrutes al máximo el inminente concierto de Sir Paul.

    Un gran abrazo a la distancia.

    LUCHO

    ResponderEliminar
  29. Hola Lucho, no sé si me recuerdes, quizá te suene Aldo Rubén, de 50 y 20. Bueno, quería compartirte el final de la relación, está en mi blog, no por mucho tiempo porque comenzaré con mi propia historia. Gracias, prometo regresar pronto a leer tus historias :)

    ResponderEliminar
  30. Hola mi estimado Aldito. Muchas gracias por comentar. Que gustazo volver a tenerte por acá.

    Como me voy a olvidar de usted, maestro. Cómo has estado? Supe que tu relación había terminado y me dio mucha pena. Lo único que te puedo decir es que hay sacar fuerzas y mirara para adelante.

    Tu sabes que eres siempre bienvenido en el blog. Con gusto esperaré tus noticias.

    Un fuerte abrazo.

    LUCHO

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

AddThis